Tanto la legislación de la Unión Europea como la Española no permiten la utilización de este tipo de caza para capturar aves, algo que desde el grupo popular ven «desproporcionado» y, por ello, hoy tratarán de cambiar la situación.

El parany ha sobrevivido durante varias generaciones de valencianos, se sigue produciendo a pesar de que lleva más de un década prohibido y que se encuentra tipificado como delito desde finales de 2010. Se extiende sobre todo por Castellón, pero como informó este periódico a principios de mes, la Fiscalía de Valencia ya ha denunciado a diez personas por usar esta técnica.

Se trata de un conjunto de arbolado en el que se incrustan varillas impregnadas de pegamento -también pueden usarse reclamos sonoros-. De este modo, durante el periodo en que las aves realizan sus movimientos migratorios y cruzan el territorio valenciano, pueden ser capturadas. En 2013, una sentencia del Tribunal Constitucional anulaba la posibilidad de llevar a cabo esta caza en la Comunitat al «no ser respetuoso» con la normativa estatal.

Pese a todo, el PP cuenta con diversos estudios ornitológicos que coinciden en establecer el carácter selectivo del parany. Por ello, y porque se trata de una actividad tradicional en la región, realizará hoy la proposición no de ley para que vuelva a ser legal.

Alegará, además, que en otros países europeos como Italia, Francia o Malta utilizan técnicas muy similares de caza, por lo que instarán al Consell a dirigirse al Ministerio de Justicia para que modifique el artículo 336 del Código Penal. Los paranyers llevan años reclamando un cambio de este tipo.